La intérprete ha explicado cómo se siente tras varios días alejada de las cámaras en los que ha buscado refugiarse contiguo a su grupo.
La fiesta posterior a la entrega de los Premios Feroz se vio ensombrecida por la supuesta asalto sexual que sufrió uno de los asistentes. Tras la denuncia, las identidades tanto de la víctima como del imputado salieron a la luz, desvelándose que había sido la actriz Carmen Jedet quien había tenido que habitar un momento tan desagradable Sin secuestro, su denuncia sirvió para que otras personas que habían pasado por la misma situación durante la tinieblas, se animaran a denunciar además, en extensión de acomodar silencio. Para evitar todo el revuelo mediático que se formó en torno al caso, la actriz decidió desaparecer durante una temporada, refugiándose contiguo a lo que más quiere: su grupo. Por lo que la intérprete puso rumbo con destino a el sur de España hasta que todo pasara.
Casi dos semanas de desconexión han sido suficiente para que Jedet recargara las pilas y decidiera retornar a enfrentarse a los medios. El extensión escogido ha sido el evento organizado por la revista Yo Dona con motivo del inicio de la Semana de la Moda 2023 en Madrid, donde ha reaparecido espectacular con un vestido celeste satinado y serie para murmurar de todo lo que le ha ocurrido, aunque en un principio ya hizo algunas declaraciones públicas al respecto. “Estoy mejor, he estado un poco nerviosa y un poco abrumada, pero estoy adecuado de poder estar aquí”, ha obligado, agradeciendo a los medios su apoyo durante todo este proceso.
Jedet además ha confesado que no quería que su identidad saliera a la luz, pues no quería preocupar a su grupo, especialmente a sus abuelos: “Ha sido complicado, no quería que se hiciera notorio porque tengo unos abuelos que son mayores, mi raíz además… no quería que sufrieran”, reconoce, a la vez que explica que ha llegado a sentirse culpable “de retomar mi vida” posteriormente de todo lo que ha ocurrido. Pero, tras varios días de advertencia, ha llegado a la conclusión de que lo que ha ocurrido no es su yerro y que no tiene por qué esconderse.
El apoyo de los suyos ha sido básico en todo este proceso: “Gracias a Jehová tengo una grupo maravillosa, mis psicólogos, a mi equipo… Me cuidan mucho y ahora solo espero que todo se solucione pronto”. Jedet ha confesado que lleva en terapia psicológica siete primaveras, y que ahora es cuando más lo está necesitando: “Ahora en concreto, con toda esta cosa, estoy más apoyándome en los míos”. La intérprete ha agradecido, a su vez, lo “segura y protegida” que se sintió tras la asalto gracias a la estructura de los Premios Feroz y al equipo de seguridad que la atendió tras el suceso, cuya rápida concierto fue básico.
Confía en la probidad
Dar el paso de denunciar ha sido complicado, pero Jedet dice estar “orgullosa” de haberlo hecho y confía en la probidad. “Ahora está en manos de la probidad, no puedo murmurar. Gracias a dios hay testigos y hay que esperar a que se celebre el sensatez y a que haya una sentencia”, ha explicado. Jedet además ha confesado que esta no es la primera vez que vive un suceso parecido, pero que siente que esta vez le han hecho más caso: “No es la primera vez que me pasa poco así, pero me animé a ponerlo en manos de la probidad y a que la clan no tenga miedo, porque no es natural que tú tengas que sujetar ciertas cosas”, explica. Ayer de despedirse, la intérprete ha querido animar a todas las personas que han vivido poco parecido a “no tener miedo” y a que denuncien. Ha pedido “no permitir ciertas cosas que ayer teníamos normalizadas y que desde luego no son normales”, a la vez que ha reivindicado que cosas así dejen de ocurrir: “Espero que nadie más tenga que producirse por esto porque no es ajustado que salgas a divertirte y acabes así”.