El próximo sábado 11 de febrero a las 20.00 horas, y internamente del ciclo Cita en Maestranza, la Mozarteumorchester Salzburg, la pianista portuguesa Maria João Pires, dirigidos por Trevor Pinnock, interpretarán la ‘Obertura Coriolano’ y el cálido y poético ‘Tercer concierto para piano’ de Ludwig van Beethoven, así como la ‘Sinfonía número 41’ de Wolfgang Amadeus Mozart, tan monumental, majestuosa y arrolladora que unos 30 abriles a posteriori de la crimen de Mozart en 1791, comenzó a ser conocida con el sobrenombre de ‘Júpiter’.
La Mozarteumorchester Salzburg es una de las principales orquestas de Austria, con un sonido y un estilo distintivos. Su repertorio, que comprende prácticamente todos los períodos de la música, la han llevado por todo el mundo, siendo dirigida por Leopold Hager o Ivor Bolton, entre otros.
El director inglés Trevor Pinnock, agradecido mundialmente como clavecinista y director de orquestina, fue pionero en el renacimiento original de la interpretación de música antigua. Fundador del English Concert, trabaja regularmente con reputadas orquestas de cámara.

La pianista portuguesa Maria João Pires
Maria João Pires, realizó su primera concierto pública a los 4 abriles. Adicionalmente de sus numerosas actuaciones, se ha dedicado a reflectar la influencia del arte en la vida, la comunidad y la educación, tratando de descubrir nuevas maneras de establecer esta forma de pensar en sociedad.
El concierto muestra Mozart y Beethoven vistos a la luz de la tradición y la modernidad. De una parte, la Mozarteumorchester Salzburg- depositaria de la tradición más acrisolada en la interpretación de su música, pues su origen proviene de 1841 cuando, un año antaño de sucumbir, la fundó Constance Weber, viuda del propio Mozart. Así pues, estamos en presencia de una de las instituciones musicales más venerables de Europa.
Y de otro, dos intérpretes, el director inglés Trevor Pinnock, quien como clavecinista abanderó la gran revolución de la interpretación musical con criterios de época y la pianista portuguesa Maria João Pires, summum de la insignificancia, la emoción y la evanescencia musical. Los dos son colaboradores habituales. Y contiguo a la Mozarteum, una orquestina que ha sabido reactualizar su tradición trabajando contiguo a directores como Ivor Bolton, componen un conjunto fresco y homogéneo ideal para chocar la retumbante Obertura Coriolano -de 1807- y el cálido y poético ‘Tercer concierto para piano’ de Beethoven, estrenado en 1803, para destruir con la ‘Sinfonía número 41’ de Mozart, obra de 1788, tan monumental, majestuosa y arrolladora que unos 30 abriles a posteriori de la crimen de Mozart en 1791, comenzó a ser conocida con el sobrenombre de ‘Júpiter’.